Cómo trabajamos contigo

Lo primero que hacemos es escuchar. Sí, suena obvio, pero muchas veces la gente llega con ideas preconcebidas sobre dónde está el problema. Y a veces están en lo cierto, pero otras veces el gasto real está escondido en otro sitio.

Después revisamos tus números. Sin juzgar. Todos hemos pagado cosas que no necesitábamos o hemos mantenido servicios por inercia. Lo importante es identificarlos y decidir qué hacer.

Y luego viene lo mejor: el plan. No uno genérico bajado de internet, sino adaptado a tu vida real. A tus horarios, a tus prioridades, a lo que sí estás dispuesto a cambiar y a lo que no.